Reseña: Azteca

Sinopsis:

Hacia 1530, el emperador Carlos pide al obispo de México que le proporcione información sobre la vida y costumbres de los indios americanos; el obispo, fray Juan de Zumárraga, envía al monarca un relato autobiográfico hecho por un indio de unos sesenta años, Nube Oscura o Mixtli, en el que narra su niñez, la mentalidad y costumbres de su pueblo, su formación y sus amores, siempre tormentosos y trágicos. Por fin, el emisario de Moctezuma entra en contacto con los españoles de Hernán Cortés, es bautizado y recibe el nombre de Juan Damasceno, aunque sigue fiel a los usos de los aztecas. Ésta es su trepidante y desgarrada historia, que simboliza el choque de dos civilizaciones, de dos maneras irreconciliables de entender el mundo.

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La verdad es que me emocioné mucho al encontrar este libro en una estantería remota de la biblioteca, hasta entonces solo había leído literatura iberoamericana, pero nunca de la américa precolonial. Tanto la cultura Azteca, como la Maya, como la Inca, siempre me han interesado sobremanera. De todas las culturas del mundo, las que pertenecen al mundo americano precolonial son las más olvidadas e invisibilizadas, y creo que esa es la razón por la qual me interesan tanto. He leído libros sobre la cultura africana, sobre la celta, incluso la maorí, pero cada vez que quería algo sobre los Mayas, Incas o Aztecas, nunca encontraba nada que no fuera desde el punto de vista del hombre blanco, y yo no quería eso. Pero al final, por casualidad encontré este libro, como si del destino se tratase.
Lo primero que tengo que decir es que el libro es monstruosamente gordo, y esto lo digo con todo el cariño del mundo, son más de mil páginas, donde seguiremos los pasos de Mixtli desde su infancia hasta que es adulto, bajo sus ojos observamos el esplendor del mundo azteca, y bajo estos mismo ojos vemos como este va de capa caída, como una bola de nieve que cada vez se hace mucho más grande, vemos como los codiciosos blancos llegamos a sus costas y como, cegados por la ambición, y más que nada, por el oro, nos apropiamos de un mundo que no era nuestro, lo sometimos, y a día de hoy, nos lavamos las manos ante semejante genocidio, y seguimos celebranco el maldito día de la hispanidad.

Me apena pensar, que por la avaricia de algunos hemos perdido la capacidad de aprender de otras culturas, de otras lenguas. Pero bueno, según parece en el libro, y yo no sé si será verdad, parece ser, que la culpa también fue de los propios aztecas, o más concretamente, de uno en especial, la debilidad y falta de liderazgo de Moctezuma llevaron a la ruina al propio pueblo azteca, y aunque la gente en general, no el mindundi de Moctezuma, lucharon e hicieron todo lo posible para evitar la invasión extranjera, nada pudieron hacer para echarnos. La verdad es que me alivia saber que los aztecas lucharon hasta el final, la verdad es que siempre había pensado, que las culturas precoloniales americanas, no habían hecho todo lo posible para defenderse, ahora sé que estaba equivocada, soy consciente de lo inteligentes que eran, aunque eso ya  lo sabía, pero ahora también sé que eran grande guerreros. Ahora más que nunca admiro a estas culturas.
Aunque también tengo que aclarar que los aztecas no eran tan distintos a las sociedades auropeas, eran una sociedad totalmente teocrática y bastante machista. Todo giraba en torno a los dioses, y las mujeres aztecas no tenían tantas libertades como las egipcias o las celtas. Aunque eso si, era sexualmente mucho más abiertas que las europeas.
En conclusión: He quedado maravillada con la cultura azteca, una pena que hayamos perdido la oportunidad de aprender de ellos.